Una mañana podrías abrir los ojos y, luego del primer café, descubrir que estás en medio de un juego demasiado peligroso para tu pálida y frágil desnudez....

domingo, 4 de noviembre de 2012

Presentación de la novela en París





















Esta semana que termina ha sido la presentación, en la Casa de América Latina en París, de la novela “En el tiempo de la bala y la salamandra”.

Un acto definitivamente muy exitoso, en una sala donde colombianos, españoles, franceses…  en resumen “ciudadanos del mundo”; llenamos y calentamos el aire con ternuras, nostalgias y mucha solidaridad.

  



















Gracias al Colectivo Debatiendo de París, que organizó el acto con toda la dedicación de quienes se asoman al futuro con esperanza y deseos de justicia.

Fueron diversas las cosas que se dijeron:

-La importancia de una literatura comprometida con el viaje del Sujeto y el cambio de la Realidad. Que también pueda ser utilizada para conservar la memoria colectiva y otorgar una necesaria y sana catarsis a las víctimas de cualquier escenario de guerra.





















-La literatura, el cine, la poesía, etc. para entregarle a la Historia la responsabilidad de recordar. Y que las víctimas puedan continuar con sus vidas.

-Quienes participamos desde la mesa, Carolina Cano (a nombre de Debatiendo), Gilberto Torres (exdirigente sindical de Colombia y protagonista en la vida real de esta historia) y el autor; nos reiteramos en las denuncias que son reveladas en las páginas de la novela: la complicidad del Estado colombiano, el crimen organizado y las grandes multinacionales del petróleo en la campaña de exterminio al movimiento sindical.





















-El auditorio mostró su emoción en la descripción de la fórmula literaria que, en esta novela, funde en un solo horno dos bloques… dos campos de la existencia del Sujeto: El desgrane de unos hechos terribles en la más cruda realidad objetiva y la versión de los mismos en el insondable abismo de la psiquis. Dos historias paralelas y mezcladas en un solo relato, que intenta contar estos hechos en toda su levedad, disparada y ejecutada. Y en todo su enorme peso imaginario.





















Muchas gracias de nuevo a todas las personas que nos acompañaron en esta primera presentación de la novela. En esa ciudad maravillosa, a la vez querida y adorada por todos los melancólicos, románticos y progresistas del mundo… París. Truene o relampaguee… aun dichas todas las frases, agotadas todas las copas de vino, cantadas todas las canciones del Ser… Y, como siempre, París seguirá allí.


No hay comentarios:

Publicar un comentario